Alguien tomó un viejo clip del programa Joy of Painting y lo convirtió en un viaje psicodélico bastante denso. Lo extraño, es que nos gustó.
En lugar de un jazz suave, la banda sonora se deforma. Las palabras tranquilizadoras de Ross están desordenadas y atascadas por la estática; Sus pinceladas son sacudidas. Su cuerpo parece estar compuesto de caras de cachorro. Por lo general, ver Bob Ross es impresionante y admirable. Aquí no tanto.
Según su creador, artBoffin en Vimeo, “esta obra de arte representa lo que sería para una Inteligencia Artificial el ver a Bob Ross en LSD (una vez que alguien invente las drogas digitales)”. Aún así, no entendemos las razones para que una Inteligencia Artificial esté en el mundo de las drogas.
Lo único confirmado, es que Bob Ross realmente tenía el pelo liso, así que nada es como parece.
