El vestuario de la ex-Pareja Presidencial siempre fue un tema fascinante para todas/os aquellos que gustan de la moda. Y es que no solo estábamos pendientes de cada creación que lucían durante las cenas estatales, los viajes al extranjero y las apariciones oficiales- sino también la conjetura a la ocasión, como es usar un diseñador americano para un evento de política interna o elegir uno extranjero en honor al invitado y su país de orígen.
Y aunque Michelle Obama se ganó su estatus como icono de estilo mientras servía como Primera Dama, estuvimos tan obsesionados con ella que pasamos por alto lo que llevaba Barack.
Así nos lo hizo saber Michelle desde la Conferencia Mundial de Desarrolladores de Apple, cuando durante una entrevista surgió el tema de la moda presidencial.
La ex primera dama aprovechó para señalar la doble moral cuando se trata de cómo visten ella y su esposo durante su estadía en la Casa Blanca.
Resulta que como a la hora de vestir los ojos siempre estuvieron puestos sobre ella, el entonces presidente llevó el mismo esmoquin para todos los eventos formales durante los ocho años que estuvo en el cargo.
¡Y nadie lo notó!
“Esto es lo injusto”, explicó Michelle, “no importa lo que hagamos, se pone el mismo esmoquin…la gente toma fotos de los zapatos que llevo, las pulseras, el collar- pero no comentaron que durante ocho años usó el mismo esmoquin, ¡los mismos zapatos!”.
Además según la Primera Dama (a quien todavía extrañamos), Barack era muy consciente de que las expectativas de su vestuario eran bajas.
“Y estaba muy orgulloso de ello también”, bromeo Michelle. “Él es como ‘Estoy listo en 10 minutos, ¿a ti cuánto tiempo te tomó’?”.
https://youtu.be/TuY4Pyvj-RY
Lo cierto es que el impacto que tuvo la esposa del presidente número cuarenta y cuatro de Estados Unidos (y una de las Primeras Damas más queridas por el público) en la industria de la moda es indeleble, pero es justo señalar que este escrutinio no siempre (nunca) se traduce a su cónyuge.
Aún así, también es importante señalar que Michelle desarrolló una reputación y seguimiento de sus trajes no solo porque lucía piezas de bajo presupuesto hasta alta costura sino porque siempre había una intención detrás de ellos.
Ella realmente entendía el impacto que podría tener usar trajes de diseñadores nacionales como solidificar un compromiso con la diplomacia al representar a diseñadores extranjeros.
Irónicamente, desde que Obama dejó el Despacho Oval se ha convertido en un nuevo ícono de la moda.
