¿Eres de los que se cambió a la vida sana? Al hacerlo, ¿te informaste bien sobre lo que debes consumir? Se cree que la fruta es muy sana y sí lo es, pero no todo el tiempo, en especial si tiene azúcar (que la mayoría de las frutas lo tiene).

De acuerdo a la científica y química Deborah García Bello, en el cuerpo humano el azúcar de la fruta se metaboliza de forma lenta. Por otro lado, con el jugo el azúcar se metaboliza más rápido, de hecho es tan veloz que no se puede procesar toda la glucosa. ¿Esto qué quiere decir?

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Hay dos tipos de azúcar, azúcares libres e intrínsecos. La distinción está en como los metabolizamos. Si se hace de forma rápida entonces son los libres, si es al contrario entonces son los segundos.

Según la química, todos los azúcares se convierten en glucosa, misma que se va a la sangre y luego a las células que te darán energía. El azúcar de una fruta es intrínseco, por lo que tu metabolismo será aún más lento y vas a tardar en tener “energía”

El azúcar libre no puede utilizar toda esa glucosa porque simplemente no le da tiempo, entonces se queda sin procesar, por lo que eso termina convirtiéndose en grasa. ¿Y qué es lo que ocasiona la diabetes?

La glucosa debe entrar a las células y para eso se secreta insulina, pero si esta última se crean en cantidades absurdas es cuando se llega a instantes poco saludables. De ahí que se forme la diabetes.

Entonces, ¿es recomendable ingerir azúcares libres? No tanto porque como es un metabolismo muy rápido entonces te crea la necesidad de querir seguir comiendo, y por ende todo se irá acumulando.