Vivimos tan encerrados en nuestras propias vidas que no nos damos cuenta de lo importante que es prestar atención a aquellas personas con las que estás compartiendo tu tiempo, las conozcas o no. Las relaciones sociales mejoran mucho cuando eres capaz de captar la atención de tu interlocutor y sobre todo, cuando eres capaz de demostrarle interés por aquello de lo que está hablando.