Un depresivo también da amor; mucho. Pero a veces también es de los que se tiene que aislar por la misma enfermedad, pero calma… eso no quiere decir que no te quieran.
A veces nos desaparecemos
A veces la depresión se hace presente y simplemente queremos estar solos y lejos de toda actividad cotidiana y rutinaria. Esto no es culpa de nadie, simplemente pasa.
Eso también se puede prestar como un desapego emocional pero no es el caso. Simplemente el espacio que cada uno se da mejora la situación, cualquiera que sea.
Somos egoístas 🙁
La depresión a veces se expresa de forma egoísta, pero eso no quiere decir que lo seamos. De cualquier manera, no te saques de onda porque nos sumergimos en un mundo oscuro del que a veces nos cuesta trabajo salir.
Nos gusta escuchar
Somos grandes escuchas, y eso es porque nosotros mismos hemos tenido que soportar a nuestros demonios y rivalizar con ellos. Por lo que entendemos, o al menos sabemos, qué es lo que podrías estar pasando.
Nos gusta llorar con alguien que no sea nuestro novi@
Hay ocasiones en que no queremos que nuestra pareja sea el soporte de terapia, y eso no es culpa de nadie. Nosotros los depresivos somos quienes lo decidimos y optamos por un amigo para llorar con él.
Pero reitero, no es nada personal.
Hay ocasiones en que de plano no tenemos apetito sexual
Así como hay días en que no salimos de la recámara, hay otros en que ni siquiera queremos entrar a ella; y eso no tiene que ver contigo, aunque puede ser duro. Habla del tema y di lo que tú también necesitas.
