La barba, la maldita barba. Un objeto de deseo para todos aquellos lampiños que sufrimos por querer tener ese símbolo de masculinidad.
Pero como la vida nos odia, sólo nos queda recordar nuestro sufrimiento.
La barba, la maldita barba. Un objeto de deseo para todos aquellos lampiños que sufrimos por querer tener ese símbolo de masculinidad.
Pero como la vida nos odia, sólo nos queda recordar nuestro sufrimiento.