Todavía no llega a nosotros el Episodio VIII de Star Wars y ya nos preocupa el futuro de la saga, sobre todo tomando en cuenta que el responsable de dirigir el Episodio IX será Colin Trevorrow, un director ‘prometedor’ después de haber visto Safety Not Guaranteed o Jurassic World.

El problema es que con la salida de The Book of Henry, el mundo también está siendo testigo de las otras cosas que puede hacer (y nada agradables) y el mundo de Star Wars parece correr peligro.

The Atlantic la describió como ‘el equivalente a comerte un pastel horneado con sal en lugar de azúcar’, Los Angeles Times dijeron que es ‘grotescamente falsa y manipuladora’ y The AV Club se refirió como a ella como ‘un largometraje que coquetea con el fascismo’.

Y esto podría no parecernos importante, pero es Star Wars: Episode IX lo que está en juego. Si tomamos en cuenta los malos sentimentalismos y giros que le gustan al director, podríamos perder la cabeza en la última parte de nuestro drama familiar espacial favorito.

Sin embargo, es bueno saber que Disney toma total control en la parte creativa y no le gusta soltarlo, para muestra la reciente salida de  los directores Chris Miller y Phil Lord para el el spin-off de Han Solo, por ‘diferencias creativas’.

De cualquier forma, pocos podrán dormir tranquilos sabiendo el rumbo que podría tomar la franquicia.