Hoy en día el celular se ha convertido casi en una extensión de ti. Lo usas como despertador, para mensajear, hablar, consultar cualquier duda, ver películas, escuchar música, para que te avise de los temblores, para que te mida la presión, cuántas calorías quemas, hacer el super, etc. ¡Es casi la versión digital de ti! Y si lo pierdes o te lo roban es el apocalipsis, ¿o no? Pero sea o no vital para ti, es importante saber que donde lo guardas no siempre es el mejor lugar y eso lo dice la ciencia.
Por lo general y lo que hacemos al dormir es guardar el celular o al lado de ti en un buró, en una mesa o bien en la propia cama, y si esta última opción lo haces tú, es posible que lo pongas bajo tu almohada.
Científicos y expertos recomiendan que no lo hagas, y mucho menos que lo tengas ahí al mismo tiempo que se está cargando, pues tenerlo en esta modalidad puede hacer que se incendie el equipo (por sobrecalentamiento). El que tu almohada lo cubra puede ocasionar ese calentamiento extra y que al final explote, y si tú eres el que va a “tapar” esa explosión entonces no va a tener un final feliz.
No lo guardes bajo tu almohada y de preferencia no lo cargues toda la noche. El que esté tiempo sin conectar mientras no lo usas también es señal de longevidad para el equipo. .
