*

Las deseamos, pero las odiamos.

via GIPHY

El círculo vicioso

Sucede, que si no te has dado cuenta que aún no llegas a tu meta, vuelves a empezar todo el proceso y se vuelve en un círculo vicioso interminable, ya que, según tú piensas no has llegado.

Usar el método cobarde

También, da la tendencia a hacer trampa, van a buscar llegar a su meta a cualquier costo sin importar el método que realicen o sobre quien tienen que pasar encima.

La trampa mental

Cuando das a conocer tus metas sientes la presión por cumplirla, algunas personas se hacen lavados cerebrales para pensar que sí llegaron a su meta, cuando obviamente no.

¿La solución?

Es hacer corte cada cierto tiempo de tus metas, porque si, por ejemplo, tu meta fue conseguir amor, cierta cantidad de dinero o lo que sea, y, lo pierdes, empiezas a pensar que no sirvió para nada todo tu esfuerzo.

Sin embargo, si te pones una meta, haces corte y luego pones una nueva, sentirás el éxito de tu proceso y no hacerlo de nuevo.