Usar tu teléfono con frecuencia cambia la forma en que tu cerebro y pulgares trabajan de forma conjunta. Esto supone unos cambios cognitivos en el cerebro a los que nosotros mismos nos exponemos al teclear en nuestras pantallas y teclados.

Así lo demostraba un estudio publicado por Cell Press en la revista Current Biology. Según éste, debido al uso que tenemos actualmente con los móviles, nuestro cerebro se acostumbra a desarrollar una mayor actividad cerebral no solo cuando están en uso los pulgares, sino también el resto de dedos.

Este estudio comparó la actividad cerebral de una persona que esta acostumbrada al uso de un smartphone con pantalla táctil y la actividad cerebral de una persona con teclados tradicionales. En concreto, la actividad se medía en el córtex sensoriomotor, la zona del cerebro que se activa con el movimiento de los dedos.

Los datos registrados entre un grupo y otro eran muy diferentes. Los usuarios que acostumbraban a usar smartphones registraban una actividad eléctrica muy superior al tocar las puntas de los dedos pulgar, índice y corazón (los que principalmente se usan al tocar pantallas táctiles).

Otro dato que revelaba el estudio es que las personas que más usaban sus teléfonos diariamente eran las que registraban mayor actividad cerebral con esta estimulación. Es decir, que se encontró una asociación directa entre el tiempo de uso del móvil con la actividad cerebral producida al teclear y usar las pantallas.

Teniendo en cuenta estos datos, los investigadores consideran como una realidad que la actividad del cerebro y su procesamiento es continuamente remodelado por la tecnología digital personal.

Este estudio, cuyos datos quedan reflejados en los electroencefalogramas de las 37 personas diestras, arroja luz y nuevos datos sobre la repercusión de las nuevas tecnologías en nuestros cuerpos y mentes.