No quieres ir a trabajar y has practicado tu “voz enferma” antes de marcar, pero ¿qué pasa si llevas tu actuación demasiado lejos y terminas sonando como si estuvieras en una producción de La Rosa de Guadalupe? Para no arriesgar demasiado y renovar el catálogo de posibles causas por las que no trabajarías, alguien ya puso manos a la obra.
Los de la aseguradora AXA encuestaron a 1,000 líderes empresariales -los jefes, en otras palabras- para preguntar qué excusas están más inclinados a creer.
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El top 10 es tranquilizadoramente suave, lo que demuestra que esas excusas de tu techo cayéndose a pedazos o incluso esa vez de la extraña araña que te mordió, eran completamente innecesarias.
Las excusas más creíbles para estar fuera del trabajo son:
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Gripe
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Dolor de espalda
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Lesión por accidente
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Estrés
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Cirugía electiva
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Depresión
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Ansiedad
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Resfriado común
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Migraña
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Todas las anteriores
Sabiendo esto, puedes ir a clases de actuación para mejorar esa “voz enferma” o comenzar a tener un bajo perfil en la oficina para usar el recurso de la depresión.
