Detecta si la gente con la que trabajas, colaboras o formas parte de su equipo está frustrado. Suena difícil pero es algo que surge a diario y muy comúnmente en una chamba. Y es que frustrarse es parte de enojarse, estar triste, y eso puede darse por no llegar a las metas establecidas o bien, nos puedes impedir lograr nuestros objetivos.

Y es que en una oficina nos puedes ser difícil llegar a lo que nos establecimos y no tiene que ser culpa del equipo de trabajo, también se pueden oponer cosas como los recursos, el tiempo, etc. Pero hay cosas que debes ver, así que detecta… Ciertos comportamientos te pueden llevar a darte cuenta de que existe frustración en el ambiente de trabajo, algo que puede contagiarse.

También te puede interesar: Échale un buen vistazo al escote de Jennifer Lawrence

El que esto exista en la oficina te puede desmotivar, no dar el 100% de ti, etc.

¿Cómo darte cuenta de esa frustración en la demás gente? Detecta si esto existe en tu oficina.

“La energía no miente” es un principio que se puede apreciar en la gente, en tu equipo. Si tú como líder haces constante contacto con esa gente, verás su comportamiento y te darás cuenta si ya no se compromete, si solo piensan más en platicar y echar el café en la oficina que trabajar, llegan tarde, etc. Ese tipo de cosas se detectan casi de inmediato y se corrigen de forma sencilla.

Un líder debe detectar los errores y entenderlos. Una vez que se haya hecho eso utilizarlos como una herramienta didáctica para que el equipo crezca. Que esto sea algo motivacional en que vez de lo contrario.

Aprender de los errores es algo bueno que además nos hará impedir que vuelva a suceder. Que haya un plan de seguimiento para eliminar los errores.