Tras ser acusado de múltiples abusos sexuales, Kevin Spacey tuvo montones de consecuencias. Su imagen quedó destrozada, su vida personal (seguro) tuvo muchos cambios, prácticamente todos sus proyectos quedaron cancelados y muy pocos querrán trabajar con el actor.

En los últimos dos puntos entra Netflix. Y es que, en noviembre, la empresa hizo publicó que rompía por completo su lazo laboral con el actor. Con todo y que la serie protagonizada por Kevin Spacey es una de las cartas fuertes del servicio.

Netflix había suspendido la producción de la sexta temporada de House of Cards. Al final, se decidió que la sexta temporada será la última y que el personaje de Kevin Spacey no aparecerá más. Por ello, Robin Wright (que interpreta a Claire Underwood) será la protagonista en la recta final de la serie.

Por otro lado, Netflix también canceló la película biográfica del escritor Gore Vidal (fallecido en 2012). Y es que ésta sería protagonizada por el actor ya despedido.

Netflix perdió millones de dólares tras las cancelaciones

Por supuesto, parar la producción de una serie tan importante y cancelar una biopic de gran presupuesto, tuvo consecuencias. Se ha informado que en su último cuatrimestre, el servicio de streaming ha perdido 39 millones de dólares.

Sin embargo, proyectos nuevos como Bright han mantenido estables las finanzas de Netflix.

Además de estas cancelaciones, el actor de 58 años también fue despedido de All the Money in the World. El director Ridley Scott decidió prescindir de sus servicios y sustituirlo por Christopher Plummer, hoy anunciado como nominado al Óscar en la categoría “mejor actor de reparto”.